Se trató del concierto número 150 que el cantante ofrece en ese escenario, lo que significa que en ese lugar lo han visto un millón y medio de personas a lo largo de su carrera.
Evidentemente más delgado, con un peinado hacia atrás, que dejó ver sus cada vez más pronunciadas entradas, Luis Miguel inició la noche del martes su temporada de conciertos en el Auditorio Nacional.
Se trató del concierto número 150 que el cantante ofrece en ese escenario, lo que significa, como él mismo lo destacó, que en ese lugar lo han visto un millón y medio de personas a lo largo de su carrera.
Vestido de negro, como acostumbra en sus presentaciones en vivo, Luis Miguel regresó a la capital mexicana decidido a convencer a las fans al ofrecer un "show" más estructurado que el último que se le vio.
Incluyó un grupo de coristas y pantallas con mejor definición, pero, además, el cantante se acercó más que nunca a sus seguidoras, a quienes se les permitió estar al pie del escenario.
De hecho, las primeras palabras de Luis Miguel al público fueron de agradecimiento.
"A pesar de la crisis global, a ustedes no los para nada ni nadie. Por eso México es tan especial, por eso se merecen un gran aplauso".
El recital comenzó cerca de las 21:00 horas con un pasaje instrumental, a cargo de la orquesta que lo acompaña, que incluyó las canciones "No sé tú", "La incondicional", "Oro de ley", "O tú o ninguna" y "Suave", al tiempo que se proyectaron imágenes de Luis Miguel en las tres pantallas de alta definición que se colocaron en el recinto.
Luego, haciendo honor a su seudónimo, Luis Miguel brilló cual astro al aparecer sobre el escenario para cantar la primera pieza: "Tu imaginación", de su material discográfico "Cómplices".
Le siguieron los temas "Suave", "Tú y yo", "Si te vas" y "Hasta que me olvides". Las palabras de agradecimiento también fueron dirigidas a viejos amigos, cuya admiración -dijo- es mutua. El periodista Jacobo Zabludovsky era una de esas personalidades a las que se refirió el intérprete.
Aunque Luis Miguel se ha caracterizado por el profesionalismo en sus "shows", éste no se libró de pequeños detalles técnicos, mismos que le causaron incomodidad al fallarle el micrófono en "No me platiques más".
"Bueno, es el primer concierto", dijo el intérprete a la audiencia a manera de justificación.
El repertorio de Luis Miguel se caracterizó por incluir una gran variedad de éxitos, entre los que sobresalieron los boleros y, como ya es tradicional en su espectáculo, "El Sol" incluyó un segmento con mariachi que encabezó "Si nos dejan", para luego complacer a sus admiradores con los éxitos de antaño.
El cantante mexicano tiene programado ofrecer en la ciudad de México 31 conciertos de su "tour" titulado "Cómplices", que inicia su segunda fase en el continente americano.
Evidentemente más delgado, con un peinado hacia atrás, que dejó ver sus cada vez más pronunciadas entradas, Luis Miguel inició la noche del martes su temporada de conciertos en el Auditorio Nacional.
Se trató del concierto número 150 que el cantante ofrece en ese escenario, lo que significa, como él mismo lo destacó, que en ese lugar lo han visto un millón y medio de personas a lo largo de su carrera.
Vestido de negro, como acostumbra en sus presentaciones en vivo, Luis Miguel regresó a la capital mexicana decidido a convencer a las fans al ofrecer un "show" más estructurado que el último que se le vio.
Incluyó un grupo de coristas y pantallas con mejor definición, pero, además, el cantante se acercó más que nunca a sus seguidoras, a quienes se les permitió estar al pie del escenario.
De hecho, las primeras palabras de Luis Miguel al público fueron de agradecimiento.
"A pesar de la crisis global, a ustedes no los para nada ni nadie. Por eso México es tan especial, por eso se merecen un gran aplauso".
El recital comenzó cerca de las 21:00 horas con un pasaje instrumental, a cargo de la orquesta que lo acompaña, que incluyó las canciones "No sé tú", "La incondicional", "Oro de ley", "O tú o ninguna" y "Suave", al tiempo que se proyectaron imágenes de Luis Miguel en las tres pantallas de alta definición que se colocaron en el recinto.
Luego, haciendo honor a su seudónimo, Luis Miguel brilló cual astro al aparecer sobre el escenario para cantar la primera pieza: "Tu imaginación", de su material discográfico "Cómplices".
Le siguieron los temas "Suave", "Tú y yo", "Si te vas" y "Hasta que me olvides". Las palabras de agradecimiento también fueron dirigidas a viejos amigos, cuya admiración -dijo- es mutua. El periodista Jacobo Zabludovsky era una de esas personalidades a las que se refirió el intérprete.
Aunque Luis Miguel se ha caracterizado por el profesionalismo en sus "shows", éste no se libró de pequeños detalles técnicos, mismos que le causaron incomodidad al fallarle el micrófono en "No me platiques más".
"Bueno, es el primer concierto", dijo el intérprete a la audiencia a manera de justificación.
El repertorio de Luis Miguel se caracterizó por incluir una gran variedad de éxitos, entre los que sobresalieron los boleros y, como ya es tradicional en su espectáculo, "El Sol" incluyó un segmento con mariachi que encabezó "Si nos dejan", para luego complacer a sus admiradores con los éxitos de antaño.
El cantante mexicano tiene programado ofrecer en la ciudad de México 31 conciertos de su "tour" titulado "Cómplices", que inicia su segunda fase en el continente americano.
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