Tras 18 años de ausencia el regreso del mexicano Luis Miguel al escenario de la Quinta Vergara ha llenado de expectativas a los medios como a sus miles de fans. Mientras sus admiradoras agotaron las entradas a su show en apenas unas horas, ya comienzan a circular detalles de las exigencias solicitadas por el astro latino.
Se espera que el cantante y su equipo compuesto por 50 personas arribe a Santiago el martes 21 de febrero, mientras que su salida del país está definida para el jueves 23 de esa semana.
Receloso de su intimidad el staff del artista ya reservó cuatro hoteles, el Enjoy y Sheraton de Viña del Mar, y una suite en Ritz Carlton de Santiago, y un cuarto que aún se mantiene en secreto, todo con el objetivo de cautelar su privacidad ya que se desconoce el lugar donde finalmente se hospedará. Entre sus exigencias “el Sol de México” exigió un camarín recubierto de telas negras y 120 toallas, además como medida de seguridad su equipo pidió medir las distancias hay entre la calle y la entrada de cada hotel.
Su show se ha programado para el miércoles 22 de febrero tendrá una duración de 80 minutos, y contará con videos que harán un recorrido por los 30 años de su trayectoria musical.
