Sí, el sábado Salinas tuvo un cantante de lujo, y a pesar de muchas personas dudaban que una estrella de su calibre viniera a Salinas, Luis Miguel se presentó con un concierto espectacular que dejó a todos con un buen sabor de boca, hombres y mujeres por igual.
Y es que no es para menos, Luis Miguel cuida cada detalle y eso se refleja al momento de subirse al escenario. El sonido, de primera, la iluminación, los efectos especiales, ni hablar.
A las 8:45 P.M. se apagan las luces del escenario. La gente se emociona, grita, chifla, golpea las gradas con los pies, pidiendo la presencia de su artista. Se enciende la pantalla en la que aparecen nubes. Hay humo. Comienza la música. Al fin aparece Luis Miguel en el escenario.
"¡What´s up Salinas! ¿Cómo están? Es un placer estar aquí esta noche. La mejor forma para que se nos quite el frío es cantando y bailando.... ." dijo Luis Miguel a un público que cautivó desde el primer momento.
Y no es para menos, a pesar de su fama de gran estrella, Luis Miguel interactuó, bromeó, charló con su público en Salinas, algo que el cantante pocas veces hace.
"Creo que en lo personal demuestra que un artista del nivel de Luis Miguel puede venir y ver un público que muchas veces tiene que viajar lejos para verlo. Yo nunca lo he visto así de entregado a su público, no sé si es porque es papá por primera vez, si está enamorado por primera vez, o la calidez del público de Salinas lo inspiró y fue la manera que ambos se inspiraron y eso fue bueno para ambos", declaró Héctor Villalobos, el promotor del evento.
El encanto del que Luis Miguel hizo derroche el sábado, en Salinas, dejó a todos sorprendidos.
"Vale la pena lo que pagamos. Tiene mucho carisma", dijo Jesús Villicaña, de Salinas.
"Me pareció muy bien el show de Luis Miguel. Me da gusto que hayan hecho esta clase de eventos en Salinas. Es algo bueno para la ciudad y para las personas, traer a artistas de la talla de Luis Miguel", agregó Villicaña.
"Yo creo que sí (hay un cambio en su vida) por como está tratando él las giras. Por ejemplo, para Las Vegas él montó un show especial para el público mexicano. Lo que tú vas a ver esta noche no es el show normal de Luis Miguel, él hizo algo especial para hoy. Entonces a lo mejor puede ser que es un cambio personal en su vida y por eso él le está dando a las cosas un poco más de cariño", dijo Rebeca León, de la empresa A.E.G. Live.
Cuando se le preguntó si este había sido el mejor espectáculo latino que se había presentado en Salinas, Héctor Villalobos no quiso comparar ni restarle mérito a ninguno de los grandes artistas latinos que se han presentado en Salinas, sin embargo respondió: "Yo tengo 27 años en este ambiente y tecnológicamente hablando, la producción el sonido, las luces, fue el mejor. Nunca se había visto el esfuerzo, el gasto, la perfección del espectáculo. Fue de lo mejor. A nivel artístico está entre lo máximo. Pero técnicamente no ha habido ningún evento que le llegue ni a la mitad", declaró Villalobos. "El público vio un show de primera que ni en Nueva York, Los Ángeles o la Ciudad de México, se puede ver", agregó Villalobos.
"Luis Miguel se portó muy bien con todos. El evento estuvo muy bien organizado, muy cultural y mucha gente lo acompañaba cuando cantaba con el mariachi", dijo Lupe Ruiz Gilpas, de Salinas. "Esperemos que traigan más eventos como este".
A lo largo de una hora y media y tres cambios de ropa, Luismi incluyó en su repertorio canciones de sus discos de Romance, como: "No me platiques más", "Contigo en la distancia", "Usted", "La puerta" y "No sé tú".
Acompañado por el Mariachi Sol de México, y vestido de charro, Luismi interpretó: "El viajero", "De qué manera te olvido", "Si nos dejan", y "El Rey", de José Alfredo Jiménez.
"¿Quieren otra?", pregunta Luis Miguel y la respuesta del público fue obvia.
"Bueno, lo voy a pensar", dice Luismi.
Se apagan las luces del escenario y tanto el mariachi como él se van.
El público grita: "otra, otra".
Tras unos momentos regresa nuevamente con el mariachi y canta su décima canción con mariachi, La Bikina.
Nuevamente se apagan las luces y abandonan el escenario.
Gente del público comenta: "se está cambiando".
Se encienden las luces del escenario y aparece en su tercer cambio de ropa de la noche y cantando "Decídete".
En esta última parte, muchos de los que han seguido su carrera recordaron canciones como "Ahora te puedes marchar", Isabel" y "Cuando calienta el sol".
Al terminar esta última canción el escenario se llena de serpentinas y Luis Miguel se despide.
"Gracias. Buenas noches. Los quiero".
Alguien le entrega un pañuelo rojo. Se limpia el sudor y lo devuelve. Empieza a saludar de mano a varias personas que se acercaron al escenario.
Luis Miguel sigue parado en el escenario unos momentos más. La gente tampoco se va y le sigue aplaudiendo.
Se apagan las luces y esta vez ya no regresó.
Parte del público empieza a abandonar el lugar, aún incrédulo. Otros todavía esperan que regrese. Pero él ya se fue.
Finalmente, los presentes, en forma ordenada, abandonan el lugar, en sus mentes aún siguen viendo las escenas de lo ocurrido y se van con un buen sabor de boca.
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